¿Tienes dolor en el hombro? ¡NO ESTÁS SOLO!

Hasta una cuarta parte de la población tiene dolor de hombro en este momento, y hasta dos tercios lo padecen al menos una vez en la vida. Las mujeres se ven afectadas un poco más que los hombres. El dolor de hombro es la tercera razón más común (después del dolor de columna lumbar y cervical) por la que las personas acuden a fisioterapia.

La probabilidad de dolor en la articulación del hombro aumenta con la edad. Afecta con mayor frecuencia a personas de entre 50 y 60 años y, como resultado, su vida cotidiana, su trabajo y su tiempo libre suelen verse significativamente restringidos. Además, el dolor de hombro es recurrente con frecuencia

¿Cuáles son los síntomas más comunes del dolor de hombro?

El síndrome de dolor de hombro se asocia principalmente con dolor. Dependiendo de la causa, ocurre principalmente durante o después del esfuerzo, en reposo y / o por la noche. Puede limitarse a la región del hombro o irradiarse hacia arriba y hacia abajo. A menudo nota movilidad limitada y / o pérdida de fuerza en una o más direcciones al mismo tiempo.

¿Cuáles son las causas del dolor de hombro?

Dolor agudo de hombro

El dolor agudo de hombro puede ser causado por una caída o un accidente que puede haber provocado la rotura (fractura) del hueso de la parte superior del brazo. Las consecuencias pueden ser dolores agudos, movilidad limitada hasta inmovilidad total, hinchazón y hematomas (hematoma). Las personas con osteoporosis también suelen sufrir fracturas de huesos.

Dolor crónico de hombro

La osteoartritis (artrosis) del hombro es una causa muy común de dolor crónico en el hombro. Esto ocurre principalmente en personas mayores y causa un dolor persistente con cada movimiento. El hombro se siente rígido e inmóvil y, a menudo, puede escuchar ruidos de frotamiento cuando se mueve. El dolor matutino es típico de este tipo de artrosis. En otras palabras, su hombro se siente inicialmente incómodo después de despertarse, pero mejora después de un tiempo con movimientos suaves (por ejemplo, cuando prepara el desayuno).

  • Síndrome de pinzamiento

Un síndrome de pinzamiento también conduce con frecuencia a un dolor crónico en el hombro. Con el síndrome de pinzamiento del hombro, los músculos del hombro y los tendones del hombro pueden comprimirse entre el húmero y el techo del hombro (acromion), lo que resulta en una lesión del tendón (lesión del tendón).

  • Artrosis de hombro (artrosis)

La osteoartritis (artrosis) del hombro es una causa muy común de dolor crónico en el hombro. Esto ocurre principalmente en personas mayores y causa un dolor persistente con cada movimiento. El hombro se siente rígido e inmóvil y, a menudo, puede escuchar ruidos de frotamiento cuando se mueve. El dolor matutino es típico de este tipo de artrosis. En otras palabras, su hombro inicialmente se siente incómodo después de despertarse, pero mejora después de un tiempo con movimientos suaves (por ejemplo, cuando prepara el desayuno).

  • Hombro congelado

Incluso un hombro congelado puede causar dolor crónico en el hombro. Al principio, casi siempre ocurre en un lado; sin embargo, más adelante también puede afectar la articulación opuesta del hombro. El síntoma inicial suele ser un dolor en el hombro que también se siente por la noche. Poco tiempo después, desarrolla severas restricciones de movilidad en todas las direcciones (fase de congelación), siendo la rotación externa la más afectada. Después de aproximadamente cuatro a seis meses, la articulación del hombro está casi completamente rígida (fase congelada). La movilidad a menudo comienza a regresar gradualmente después de ocho a 12 meses (fase de descongelación).

¿Qué puede ayudar a reducir el dolor de hombro?

Si realiza ejercicios específicos, su dolor a menudo disminuirá y la articulación del hombro se volverá más flexible y funcional nuevamente. Los ejercicios físicos suelen tener más éxito que otras terapias. Tenga en cuenta que cada ejercicio debe ser y permanecer indoloro. Para hacer esto, es posible que deba comenzar con una intensidad más baja y mantener el rango de movimiento bajo. Puede aumentar gradualmente la intensidad. Y otro consejo: asegúrate de tener una buena postura y control de los movimientos.

 

 

El enfoque BLACKROLL® combina técnicas miofasciales con ejercicios de movilización y estiramiento. Por último, es importante desarrollar los músculos necesarios para unos hombros sanos.

 

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